
Las madre primerizas queremos que nuestra pañalera sea muy mona, muy perfecta y a juego con el carrito del bebé. Luego te das cuenta de que da igual si es roja, negra o a topos, que lo que importa es que tenga muchos bolsillos y compartimentos: Para una muda limpia, para la comida, para los pañales, para las medicinas... Porque tenerlo todo ahí a mogollón mientras el chiquillo se está cagando como un aspersor y la mancha del body va creciendo por todo el cuerpo que aquello parece el Prestige cuando petó, pues como que da muchos nervios y te urge tenerlo todo a mano y ya la estética como que te la chufla.
A mí, mi amiga Simona, que un día os hablaré de ella porque es maravillosamente friki, me regaló la mochila-pañalera de Salvador Bachiller que es una pasada absoluta, aunque las cremalleras son una mierda, pero bueno, te las cambian sin problema.
Total, que yo ya jubilé mi primera pañalera a la primera de turno, y ya por fin tenía todo organizadito y perfecto pero, claro, cuando sales a dar una vuelta no necesitas ir hasta los topes como si fuera aquello la mochila de un perroflauta ¿qué hacer entonces? ¿eh? Pues ahí aparece otra amiga, Vero, con su Cushy Tushy (al loro el nombre): La micro pañalera. Ahí me he enamorado hasta las trancas. Es guay porque caben dos pañales y cremitas y encima tiene cambiador. Y ocupa como un bolsito de mano. Ah, bueno, y viene en varios colores y en topos, por cierto. Me acabo de comprar una en esta tienda (ver otras tiendas) y estoy más contenta quepaqué :)
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New parents tend to buy a cool changing pad that matches the buggy. Then you end up finding out that what you need is something filled with pockets, where clean clothes, creams and things can be categorised perfectly. My perfect find was this backpack, but, what happens when you just need a couple diapers for your daily stroll? Well, today my friend Vero came with the Cushy Tushy and I fell madly in love with it. It's beautiful, small and fits like a small hand-purse. Just bought and feel so happy :)