26.6.12

no es mendigar, es pedir con estilo :: begging? no, it's asking with a style


Cuenta una leyenda urbana que el gurú de la publicidad David Ogilvy de camino al trabajo se topaba a diario con un hombre que pedía en la calle. A su lado, un cartel que decía "Soy ciego". Ogilvy observaba cómo todos ignoraban al pedigüeño, así que un día cogió un rotulador, se acercó al cartel y amplió el texto con un bello "Es primavera, y soy ciego."
La poesía del contundente reclamo dió sus frutos e inmediatamente Ogilvy contempló cómo desde aquel día el vaso del ciego rebosó de dinero.

Algo así ocurre en este bello experimento, donde Marcos y Mario querían hacer algo para ayudar a la gente sin hogar. A la vista de que los carteles, y sonidos de instrumentos varios no obraban su efecto, se les ocurrió hacer una “fuente de los deseos”, dársela a un indigente y ver el resultado. Aquí lo tenéis.
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There’s an old story, usually attributed to David Ogilvy, about a copywriter whose daily walk to work took him past a blind beggar on a street corner. His sign read, “I’M BLIND. PLEASE HELP.” Every day, the beggar was largely ignored by the passers-by. One sunny morning, the copywriter stopped, took out a marker pen and scribbled three words on the sign, then moves on. From that day, the blind man’s cup became stuffed with notes and overflowing with change. The copywriter had adapted the sign to read: “IT’S SPRING AND I’M BLIND. PLEASE HELP.”

This is what Marcos and Mario made in order to help homeless people: change the cup for a wishing fountain. Here is the result.
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(via
andar lento)

2 comentarios :: comments :

carmenseñorapinti. dijo...

Desde que vivo en Roma, he descubierto otro tipo de mendigos ,los que piden con perros (visto que aqui la gente es más sensible a los canes que a los niños) ,los que se sientan a leer con un platito delante pá las moneditas,los que piden y están hablando por el movil,los pedigüeños vestidos con ropa más cara que la mia y por ultimo mi preferido un señor de unos 100 kilos con un cartel "TENGO HAMBRE ''

Alber dijo...

Yo que vivo en Pamplona estoy harto ya de sortear borrachos con unos pedos del 15, tirados en medio la calle, expuestos a que les roben, les pinchen, les sodomicen y mil tropelías más!! Es totalmente factible acercarse a estos flipados a 20 cm y hacerles fotos de los agujeros de la nariz, y no se enteran los gilipollas!!!